TENDENCIAS DE CONSUMO EN EL SECTOR ALIMENTARIO

La mayor exigencia del consumidor, la competencia empresarial y las nuevas tecnologías, unido a la influencia de los mercados emergentes, marcan unas pautas de consumo muy influenciadas por la crísis económica, extendida a todo el sector agroalimentario.

 

Las tendencias se basan en la evolución natural de las necesidades, motivaciones y preferencias de los consumidores. En materia específica de  consumo alimentario, éstas están siendo alteradas por una creciente concienciación del consumidor hacia los productos, las marcas y las cadenas de distribución. Obviamente las dificultades económicas presentes en la sociedad, también provocan unos cambios coyunturales que favorecen el factor precio, incrementando el valor puntual de las marcas blancas. Diferentes analistas consideran, no obstante, que las tendencias de futuro obligarán a nuestro sector a adaptarse a los nuevos ritmos de vida, con alimentos disponibles en cualquier momento y lugar y que, sin merma de calidad, salubridad y cumplimiento normativo, creen una satisfacción plena al consumidor.

 

Según las apreciaciones del gurú Phil Lembert, “Los compradores están buscando unos alimentos más saludables para ellos y sus familias, y las marcas tendrán que cumplir con estas demandas a través de la innovación de productos y el uso de la tecnología móvil para realizar compras más rápido y de manera más conveniente." En su opinión, las tendencias que marcarán el futuro se encuentran asociadas a la influencia de una nueva generación de consumidores, especialmente las mujeres de los países industrializados, con fuertes afiliaciones a las marcas y a la caza de gangas. Lembert también predice un crecimiento de oportunidades para las empresas que pongan en valor efectivo sus políticas de Responsabilidad Social Corporativa, la mejora de canales de promoción y comercialización basados en las oportunidades de las nuevas tecnologías (“compra a un click” y prescripciones a través de influencers en las Redes Sociales), además de una mucho mayor exigencia en las cualidades estéticas de los productos (el packaging es aquí fundamental).

 

En todo caso, los principales cambios de consumo se están ya produciendo gracias a la Globalización y la Internacionalización de los mercados y, de manera especial, por una transformación de la cadena de valor alimentaria que posiciona al consumidor como objetivo principal de todo el ciclo productivo. Las empresas del sector alimentario deben concebir un nuevo modelo en el que la Salud y el Servicio (y no como hasta ahora exclusivamente la Nutrición y la Venta) son los verdaderos ejes de sus negocios.

 

 

A largo plazo,  el Centro tecnológico AZTI-Tecnalia, ha elaborado un valioso informe de tendencias que marcarán las pautas de consumo hasta el año 2020.  Así, las tendencias que se han identificado como las que presentarán mayor potencial de crecimiento en el ámbito alimentario europeo en los próximos años serán:

 

  • FoodTelling: Dotar al alimento de un mensaje que aporte al producto una mayor transparencia informativa, una identidad específica y un valor añadido que lo conecte directamente al consumidor.
  • SuperSense: Buscar una experiencia multisensorial en el comprador provocando sensaciones originales y diferentes asociadas íntimamente al placer.
  • SlowCal: Asociando el producto a valores vinculados a la concienciación y a la RSC en materia social, económica y ambiental.
  • Here&Now: Facilitar el estilo de vida de los consumidores urbanos que demandan flexibilidad, movilidad, optimizar la gestión de su tiempo, cuidar su salud, y la gratificación instantánea de sus necesidades en cualquier momento y lugar.
  • Eatertainment: Generando experiencias culinarias memorables que conectan con la parte más emocional de los individuos, que se mueven por lo aspiracional y el deseo de novedad, sorpresa, diversión, etc.
  • MadeSimple: Facilitando la compra mediante las nuevas tecnologías y el consumo inteligente frente a la saturación publicitaria, la infoxicación y la falta de tiempo.
  • MyHealth: Reflejado en la búsqueda de los individuos de un consumo responsable y una alimentación saludable adaptada a las necesidades personales para lograr el equilibrio físico y emocional.
  • EgoFood: Favoreciendo la expresión de valores y aspiraciones de estatus de los consumidores a través de la alimentación. Esta tendencia provoca el consumo de productos que encajan con la personalidad del consumidor y con los que éste se siente identificado.

 

Como vemos, el sector alimentario observa una demanda creciente de tendencias estrechamente vinculadas a las demandas del usuario-consumidor (hoy en día ya denominado en algunos círculos Prosumidor), mucho más allá del modelo tradicional que focalizaba toda la cadena de valor en torno al Producto.

 

El reto pues de nuestras empresas en un mercado cambiante y globalizado consiste pues en predecir y detectar cuáles son aquellas necesidades de nuestros públicos, para lo cual deberemos relacionarnos mucho más estrechamente con los mismos, potenciando consecuentemente nuestros entornos de comunicación y adaptando la I+D+i productiva, además de flexibilizar las cadenas de producción, logística, distribución y comercialización.

 

 

+info:

  • Centro tecnológico especializado en investigación marina y alimentaria, AZTI-Tecnalia: http://www.azti.es/es/ 
  • Tendencias en el sector agroalimentario. Informe de Ainia Centro Tecnológico: http://www.ainia.es/html/test/consumidor/inicio.htm

 

 

 

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