ISO 31000: GESTIÓN DEL RIESGO EN EL SECTOR ALIMENTARIO

El estándar internacional ISO 31000 se encarga de evaluar y reducir los riesgos que se producen en el desarrollo de las actividades de las empresas.

 

Específicamente en el sector alimentario, la Certificación UNE-ISO 31000:2010  establece los principios y directrices necesarios para implantar un eficiente Sistema de Gestión de Riesgos que minimice la exposición a sufrir riesgos para la salud, la seguridad y el medio ambiente en toda la cadena productiva, transformadora y de comercialización de productos y servicios alimentarios.

 

El diseño y la implantación del Sistema de Gestión de Riesgos (generalmente bajo el marco del ERM: Enterpise Risk Management)  dependerá de las diversas necesidades de cada empresa y sus objetivos concretos, estimando su dimensión, estructura, tipo de operaciones, procesos, proyectos, productos, servicios, etc.

 

La estructura del SGR, conforma a la norma ISO 31000, se focaliza en tres variables básicas:

1. Los Principios de Gestión del Riesgo. Para lo cual deben estimarse los siguientes factores:

- Creación de valor. Contribuye a la consecución de objetivos así como la mejora de aspectos tales como la seguridad y salud laboral, cumplimiento legal y normativo, protección ambiental, etc.

- Está integrada en los procesos de una organización. No debe ser entendida como una actividad aislada sino como parte de las actividades y procesos principales de una organización.

- Forma parte de la toma de decisiones. La gestión del riesgo ayuda a la toma de decisiones evaluando la información sobre las distintas alternativas.

- Trata explícitamente la incertidumbre. La gestión del riesgo trata aquellos aspectos de la toma de decisiones que son inciertos, la naturaleza de esa incertidumbre y como puede tratarse.

- Es sistemática, estructurada y adecuada. Contribuye a la eficiencia y, consecuentemente, a la obtención de resultados fiables.

- Está basada en la mejor información disponible. Los inputs del proceso de gestión del riesgo están basados en fuentes de información como la experiencia, la observación, las previsiones y la opinión de expertos.

- Está hecha a medida. La gestión del riesgo está alineada con el contexto externo e interno de la organización y con su perfil de riesgo.

- Tiene en cuenta factores humanos y culturales. Reconoce la capacidad, percepción e intenciones de la gente, tanto externa como interna, que puede facilitar o dificultar la consecución de los objetivos de la organización.

- Es transparente e inclusiva. La apropiada y oportuna participación de los grupos de interés (stakeholders) y, en particular, de los responsables a todos los niveles, asegura que la gestión del riesgo permanece relevante y actualizada.

- Es dinámica, iterativa y sensible al cambio. La organización debe velar para que la gestión del riesgo detecte y responda a los cambios de la empresa.

- Facilita la mejora continua de la organización. Las organizaciones deberían desarrollar e implementar estrategias para mejorar continuamente, tanto en la gestión del riesgo como en cualquier otro aspecto de la organización.

 

2. La Estructura para la gestión de riesgos: Para lo cual debe establecerse un compromiso transversal de toda la organización, partiendo de la Dirección a todos los departamentos y empleados, facilitando el Diseño adaptado de dicha estructura.

3. Finalmente el Proceso del SGR, garantizará la adecuada implementación del SGR, la eficiencia en los mecanismos de  control y evaluación, su seguimiento y revisión periódicas y los tratamientos a efectuar, junto a las mejoras continuadas del sistema.

 

El diseño e implantación normativa del SGR, permitirá a la organización:

  • Fomentar la gestión proactiva (en lugar de la reactiva).
  • Identificar y tratar el riesgo en todos los niveles de la organización.
  • Detectar la identificación de oportunidades y amenazas.
  • Cumplir con los requisitos legales y las normas internacionales.
  • Mejorar la información financiera.
  • Mejorar la gestión empresarial.
  • Aumentar la confianza de los stakeholders de la compañía.
  • Establecer una base fiable para la toma de decisiones y planificación.
  • Mejorar los controles.
  • Repartir y utilizar de forma efectiva los recursos para la gestión de riesgos.
  • Mejorar la eficacia y la eficiencia operacional.
  • Aumentar la seguridad y salud en el trabajo.
  • Mejorar la prevención así como la gestión de incidentes.
  • Minimizar las pérdidas.
  • Mejorar el aprendizaje organizativo.
  • Mejorar la resistencia organizativa.

 

 

Cabe destacar que la UNE/ISO 3100:2010, al tratarse de una certificación genérica, no establece directrices para el tratamiento de riesgos concretos sino que da orientaciones para la implantación de un SGR compatible con los estándares de gestión de riesgos particulares de cualquier sector. Nuestra recomendación final es recabar toda la información adicional en materia de seguridad y riesgos, con el fin de gestionar de manera adecuada el diseño e implantación del SGR concreto al sector de actividad específico de nuestras compañías. 

 

 

 

+info:

  • Curso AENOR sobre la Certificación UNE-ISO 31000: http://www.aenor.es/aenor/formacion/cursos/fichacurso.asp?curso=TR-01&anyo=2014&modal_origen=PR#.U6FpvpR_uSo
  • Plataforma Tecnológica ISOTools e ISO 31000: http://www.isotools.org/2013/10/23/iso-31000-sector-alimentario/
  • Asociación Española para la Calidad (AEC) y Certificación ISO 31000: http://www.aec.es/web/guest/centro-conocimiento/iso-31000

 

 

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